En la temporada 2018/19, se disputó la tercera edición de la Copa Santa Fe. 28 equipos de siete asociaciones santafesinas, aspiraban a consagrarse del torneo provincial y lograr el ascenso al Torneo Federal, hito que consiguieron Santa Paula de Gálvez en 2016 y Sport Club Cañadense de Cañada de Gómez en 2017. El tercer título otorgado por la provincia lo recibió un equipo de la Rosarina, Talleres RPB de Villa Gobernador Gálvez.
«Logramos un objetivo importante, muy lindo en su momento. Cuando se logra algo así, a pesar de todos los inconvenientes económicos que se nos presentaron, es una satisfacción enorme. Fue un objetivo grupal que nos planteamos desde el inicio, estar entre los primeros puestos. El contexto que vivimos, lo hizo aún más meritorio», declaró Juan Pablo Lupo, DT de aquel equipo.
Franco Borsellino; Juan Pablo Camino; Agustín Chiana; Juan Manuel Gandoy; Matías Medrano; Leandro Faranna; Joaquín Cingolani; Mauro Burgos; Ignacio Ferrari; Valentín Cuevas; Agustín García; Ignacio Roca; Bruno Giacomini; Manuel Canosa; Juan Pablo Lupo (DT); Flavio Bianchini (AT); Mariano Pizzo (AT); Diego Portillo (PF); Marcos Guarneri (Utilero).
«Al equipo lo describiría como inteligente. Supo que cuando bajábamos los brazos ante las adversidades, había que privilegiar lo deportivo y entrenar de manera profesional. Entre todos se dijo ‘vamos a lograr este objetivo’. Era un grupo con una calidad humana extraordinaria, tanto de los jugadores como del cuerpo técnico. Ni hablar de la jerarquía individual de cada uno. Este equipo supo direccionar el camino, a pesar de que muchas veces estuvimos al borde de bajar los brazos, al final del trayecto vimos la luz y logramos el objetivo«, expresó Lupo.
El camino
Talleres fue el campeón indiscutido del certamen, lo ganó de principio a fin. Tan es así, que en la Fase Regular finalizó en la primera posición con un récord de 11-1 (NdR: ganó los seis de local y como visitante, obtuvo cinco victorias y una derrota). Luego, en la serie de playoffs, sólo perdieron tres juegos en 12 disputados.
- Octavos de final vs. Almagro de Esperanza (2-1)
- Cuartos de final vs. Brown de San Vicente (2-0)
- Semifinal vs. Racing LTC de San Cristóbal (2-0)
- Final vs. Platense Porvenir de Reconquista (3-2)
«Me di cuenta que éramos serios candidatos cuando cerramos el plantel. A partir de ahí, por mera consecuencia, uno se dio cuenta que íbamos a estar entre los primeros puestos. Y lo logramos. Yo estaba convencido que a partir del laburo consciente de todos, se iba a lograr el objetivo«, confesó el entrenador.
Y agregó: «La serie final a cinco juegos fue estresante. No se disfruta en el momento, hay que estar en varios frentes a la vez. Pero me quedo con la parte buena, que fue lograr el objetivo. Si ese equipo hubiese continuado, habría logrado muchas cosas más. Los chicos estaban muy compenetrados en lo que se tenía que hacer«.
El partido consagratorio, lo ganó el conjunto de Villa Gobernador Gálvez como local por 86 a 82. Chiana fue el goleador del cotejo con 31 puntos. Reviví el encuentro completo.
Durante el transcurso de la temporada, el plantel de Talleres presentó varios inconvenientes a la hora de recibir su salario por varios meses. Sin embargo, el grupo supo hacerse fuerte y unificarse por el objetivo principal, que era salir campeón.
Juan Pablo Camino, partícipe de aquel torneo, comentó: «Para mí significó mucho, porque fue un equipo de amigos, con gente a la cual quiero mucho. Borsellino y Chiana son de mis amigos más íntimos. A Lupo y Bianchini los conocía por haber compartido equipo en Central y los admiro mucho. Al igual que Gandoy y Faranna, que teníamos una linda amistad. El grupo era único, muy humano, de los mejores que he estado. No hubiéramos logrado nada sin eso y sin el hambre de ir para adelante, superando adversidades económicos que fueron muy difíciles para el plantel. Éramos unos ‘toros’. Me saco el sombrero con cada uno».
Franco Borsellino, estandarte del equipo campeón, manifestó: «Lograr un campeonato con amigos de la vida no se da siempre. Fue muy emocionante, un recuerdo increíble. No le deseo a nadie la temporada que pasamos nosotros, la pasamos muy mal. Pero a pesar de eso, nunca nos fuimos del objetivo. Ese equipo se puede describir con tres palabras, compromiso, humildad y temperamento«.
Los recuerdos
Lupo: «Siempre trato de quedarme con los recuerdos más lindos. Los viajes, las reuniones con el grupo, los entrenamientos. Era un equipo muy unido que sobrellevaba las adversidades. Y deportivamente hablando, a cada partido lo disfrutábamos mucho, era el momento donde nos olvidábamos de los problemas y éramos felices. Festejé el torneo en un bar de Pellegrini y Alem, con Flavio Bianchini y Manuel Morello, quienes me acompañaron en ese momento para rememorar la temporada. Siempre es lindo festejar con amigos de la vida».
Borsellino: «Tengo miles de recuerdos de ese equipo. Pero me quedo con el festejo del segundo partido de cuartos de final en cancha de Brown de San Vicente, nos fuimos todos los jugadores y el cuerpo técnico a los saltitos y abrazados. Fue hermoso«.
Camino: «Ese mismo año, llegó mi nena, Ibiza. Fue increíble, trajo el pan debajo del brazo. Antes de ser papá, en vez de festejar el ‘baby shower’, hicimos el ‘papi shower’. Con el equipo nos fuimos todos a la isla y compartimos el día juntos. Algo muy lindo«.