A lo largo de los años, Temperley subrayó la eficiencia con la que preparó a todos sus planteles. Sostuvo tanto a sus formativas como equipo mayor en los podios locales, provinciales y nacionales. En 2021, buscó mantener el mejor estado en sus deportistas. La institución quedó a disposición total de Noelia Robledo.
En 2017, tuvo la posibilidad de estar como asistente y PF en el básquet femenino de Ayacucho 2167 durante dos años. A mediados de febrero se le ofreció la prepración física de ambas ramas del básquet, a lo cual no tuvo dudas de aceptar, ya que siempre se sintió cómoda.

Primeramente, Noelia, explicó la forma en que afrontó la problemática mundial: «Durante la pandemia trabajamos virtualmente. Envié rutinas simples para que cada jugador/a la pudiera adaptar a su espacio y materiales».
«Siempre traté de mantener la intensidad alta, para que al momento de volver al club pudiéramos seguir entrenando igual que antes», afirmó.
«Cuando llegué a Temperley empecé con los trabajos físicos desde cero», aclaró con énfasis, tras la vuelta de un año complicado. Por consiguiente, agregó: «Con cada DT de las diferentes categorías, priorizamos cuidar el cuerpo de cada jugador/a y adaptarlos de a poco».

Luego, Robledo detalló cómo se desenvolvió antes del primer ‘stop’ del año: «Los ejercicios que trabajo durante la semana dependen de cada categoría, carga horaria y partidos. En cuanto a las individualidades, exijo a cada jugador/a mejorar también el entrenamiento invisible como alimentos, descanso, etc.».
«Los objetivos lo proponemos con todos los profes del club en conjunto. Es un trabajo en equipo, queremos seguir por el mejor camino posible y sacar lo mejor de cada jugador/a», cerró.