Mauro Mena, preparador físico del plantel femenino de Náutico, dialogó con Línea de Tres sobre cómo fue trabajar durante la pandemia y cómo afrontan la vuelta. El conjunto de la ribera, comandado por David Della Mora disputará el retorno del Torneo Federal.
Primeramente, Mena, comentó cómo trabajó durante la pandemia: «Las primeras semanas pusimos foco en no perder movilidad, ya que pensábamos que serían solo un par de semanas. Con el correr de los días me di cuenta de que teníamos que mantener más que la movilidad. Adaptamos rutinas de fuerza y funcionalidad, tres o cuatro estímulos por semana en todas las categorías para mantenerlas física y psicológicamente activas».
Con respecto al retorno, mencionó: «A mitad de 2020 la situación fue muy variada. No sucedieron grandes pérdidas físicas porque habíamos hecho una pretemporada extensa e intensa. Nos ayudó a soportar el bajón. Pero hubo muchos casos de jugadoras que les costó más que a otras mantenerse activas. Puntualizando e individualizando un poco los retornos lo pudimos arreglar».
Por otra parte, destacó: «Para este torneo iniciamos la pretemporada a fin de enero, sin saber que participaríamos. Cuando vino la novedad, ya poseíamos una ganancia grande en relación con el trabajo enorme de las chicas. El técnico me da siempre el espacio necesario incluso de su tiempo y eso es vital para un profe».
Sobre el nuevo confinamiento, declaró: «Hoy estamos en una situación muy particular. Si bien pudimos retomar las prácticas con un ritmo diario, no pudimos contar con la cantidad de horas necesarias para la parte del gimnasio. Eso fue debido a las limitaciones de horarios por las restricciones. Estamos con mucho aire, pero empezando a reparar la parte muscular. Lo bueno es que siempre el equipo está disponible al 100% y con ganas».
«Los parates son muy malos, para nuestro equipo y para cualquiera. Te quitan ritmo e intensidad, nuestra principal característica. Siempre logramos arreglarnos, pero obviamente en condiciones de no pandemia el equipo podría estar muchísimo mejor. Siempre tratamos de hacer lo máximo», recalcó.
El sábado volverán a disputar el torneo y para esto Mauro realizó un balance de cómo ve al equipo: «En aspectos generales, muy bien. Están muy ansiosas y quieren volver cuanto antes. Cada vez que aparece una fecha de juego se emocionan. Desde lo físico nos falta recuperar indicadores de fuerza y movilidad que nos quitó la pandemia. Desde la parte basquetbolística, adaptarnos a las exigencias de la categoría, por razones obvias».
«El promedio de edad de nuestro equipo es de 17 o 18 años».
Además, agregó: «Es cuestión de tiempo, paciencia y trabajo. Cuando les preguntamos si estaban dispuestas a encarar esta idea, no dudaron. Sabiendo lo que demanda, no se achicaron. La idea, es motivar a las más chicas para que vean que al llegar a la primera división, van a tener competencia de muy buen nivel. Tanto en Rosario como en el Federal».
Cerró la nota, hablando del objetivo que se planteó como PF: «Busco darles la mayor cantidad de elementos posibles para que se desarrollen y buscar su máximo rendimiento. Potenciar todo lo que se pueda sus capacidades y también cuidar la condición de cada una. A nivel formativas, generar el hábito de entrenamiento, educar en el movimiento. Y por supuesto, ayudarlas a crecer siendo buenas personas y compañeras».