Jáchal concluyó su primera temporada en la exigente Liga Argentina. Afrontando dificultades institucionales, el elenco sanjuanino finalizó en la última colocación de la Conferencia Norte con un récord de tres triunfos y 25 derrotas.
Luego de su gran paso por el Torneo Federal en 2021, Jáchal se preparó para encarar un torneo de mayor dificultad. El entrenador rosarino Lisando Salles dialogó con Línea de Tres sobre lo que fue el paso de la institución en la segunda categoría del básquet nacional.
En primera instancia reflexionó: «Fue muy difícil la temporada en muchos aspectos. En las conclusiones finales, no se puede sacar el contexto en el que vivimos. No hay que perder de vista que nosotros ganamos el Torneo Federal un 16 de agosto y el 5 de septiembre ya estábamos entrenando».
Además, destacó: «Casi todos los equipos ya estaban constituidos y eso influyó. La mayoría de los jugadores estaban contratados. Apostamos a armar un equipo competitivo de la mejor manera posible. El club hizo un esfuerzo muy grande. Sin dudas que los tiempos tan cortos hicieron que las cosas no fueran como uno pretendía».
Con lo que respecta a la parte deportiva, manifestó: «Si bien la preparación no fue mala. El tema más importante pasó por la infraestructura del club y la administración. Se obtuvo un logro tan valioso para el club, el cuál no estaba preparado para afrontarlo de manera tan rápida. Seguramente si hubiese sido con otros tiempos, las cosas podrían haber sido diferentes».
«Fue lo que nos tocó afrontar, por eso digo que no se pueden sacar conclusiones sin poner todo el contexto en la balanza. Costó mucho cerrar la temporada en el Federal, el ascenso trajo aparejado complicaciones económicas y ya se arrancó de un primer momento mal», comentó.
También, afirmó: «Desde lo deportivo no cumplimos con los objetivos, soy totalmente autocrítico en esto. Estoy en deuda, conmigo; los jugadores y obviamente la institución. Son ellos quienes me respaldan y dan la posibilidad de desarrollar un proyecto a largo plazo».
En cuanto a los resultados, detalló: «Arrancamos bien el torneo ganándole a Salta Basket, después perdimos en prórroga con Rivadavia. Desde lo deportivo comenzamos bien a pesar de la lesión de Ismael Sarruff y la ausencia del extranjero al que apuntamos para el juego interior».
A lo que agregó: «Fuimos a una gira en Villa María donde la categoría nos mostró la realidad. Pero en la gira de Mendoza fue donde realmente empezamos a competir y le ganamos a Norte y Rivadavia. Estábamos bien, creciendo cómo equipo, con la vuelta de Ismael Sarruff y con la esperanza de que llegara el americano».
«A partir de ahí aparecieron los inconvenientes económicos y eso empezó a hacer mella en lo deportivo. Veníamos en franco crecimiento y de ahí en adelante la recuperación se terminó y caímos en un pozo de negatividad donde todo pasó por el cobrar», confesó.
Lisandro relató los conflictos para continuar en la competencia: «Cerramos la primera parte como pudimos, no cómo queríamos y apareció la incertidumbre de si volvíamos. La plaza empezó a estar en juego, no aparecían los recursos económicos para acomodar el club y se empezó a desarmar el plantel».
«La verdad es que se hicieron muy largos los casi cuatro meses que duró la segunda parte. Me quedé conforme con los dos refuerzos que se sumaron al equipo. Logramos algunas victorias importantes y en el momento en el que dábamos el salto luego de vencer a Libertad en Sunchales, para pasar a jugar por los play-in Neyseer se fue a jugar con su selección. No contamos con él para enfrentar a Echagüe, después de eso el equipo se pinchó definitivamente», subrayó.
«La categoría no te perdona», apuntó.
«No tiene contemplación con problemas institucionales, errores o tiempos de formación. Desde lo deportivo las grandes diferencias tienen que ver con la intensidad, el ritmo de juego, con esos partidos que podíamos haber ganado con algunos tiros que nos quedaron. Nos dimos cuenta de que pasa por ahí, por no perdonar el error rival», señaló.
«Queremos buscar el crecimiento deportivo. No me conformo con el Torneo Federal, sin dudas que estoy pensando en buscar herramientas para seguir creciendo. Esta temporada me hizo ver que siempre hay nuevas experiencias humanas y que el trabajo que uno había empleado en el Federal había sido más sencillo. En Liga Argentina hubo que recurrir a otras herramientas y sin dudas que es aprendizaje constante», señaló.
Y concluyó hablando de los puntos a optimizar en el club: «Hay que profesionalizar todas las áreas de la institución. De la primera a la última persona que trabaja dentro del club. No se puede improvisar en esta categoría. La figura del mánager es muy importante y también hay que apostar a ese rol. Está todo por aprender y mejorar. Hay que soñar e ir por más, no me voy a conformar con nada».