En una larga noche en Santo Domingo, la Selección perdió 69 a 80 ante los locales. Lo mejor de los dirigidos por Pablo Prigioni pasó por las manos de Nicolás Brussino, quien culminó con 16 puntos y siete rebotes. El siguiente encuentro será el domingo 13 a las 21:15, visitando a Bahamas en busca de sumar puntos vitales en estas Eliminatorias.
Los centroamericanos salieron decididos a atacar la pintura y correr en cada recuperación. Mientras Argentina priorizó un juego de pases, con dos bases como ‘Penka’ Aguirre y José Vildoza en el quinteto inicial. Demostrando la necesidad de orden y distribución. Junto a un buen pasaje defensivo, Brussino empezó a liderar el ataque nacional para terminar el periodo 20 iguales.
El segundo cuarto comenzó desfavorable, debido a consecutivas pérdidas. Pero especialmente a la efectividad externa del rival que le permitió obtener una luz de 10 puntos y obligó a Prigioni a solicitar tiempo muerto. Con permanente rotación y el alero cañadense tomando definitivamente la posta ofensiva, la ‘Albiceleste’ se fue al descanso largo abajo 33 a 41.
La reacción llegó en el tercer cuarto a través de estupendas jugadas colectivas y esfuerzo en el tablero propio, con Juan Pablo Vaulet y Marcos Delia aportando al goleo para acortar la brecha a una posesión.
Sin embargo, sobre todo desde el lanzamiento de Suero y Peña, el local volvió a escaparse. Hasta que la irrupción de una gotera detuvo las acciones por más de 30 minutos con el tablero 40 a 49. En el reinicio, continuó la tónica con el tiro exterior dominicano y una grata aparición de Vildoza del otro lado para culminar 52 a 61.
El segmento final tuvo a un correcto Francisco Cáffaro y un Lucio Redivo insistente en la penetración. Asimismo, también a un dinámico combinado rival que conservó la ventaja. Abrochó la victoria 69 a 80 e igualó la línea de Argentina en la tabla de posiciones de las Eliminatorias.
El seleccionado tropezó así en la primera parada de esta quinta ventana rumbo a la cita mundialista. Ahora será cuestión de recobrar fuerzas, ajustar detalles y arribar a tierras bahameñas con la ilusión intacta y el claro objetivo de acercarse un paso más al sueño mundialista.
Fuente: CAB.
