Antes de incorporarse al Club Básquet Vila-Seca Esto, Ianina Martinelli, ya daba para hablar en España. Newell’s Old Boys y Atalaya fueron sus comienzos en el básquet y, al mudarse al viejo continente, decidió probar suerte en el club catalán Básquet Salou.
Tras terminar el confinamiento por COVID-19, recibió un llamado para dar el salto de calidad. Línea de Tres comparte las sensaciones de la joven rosarina que está viviendo el sueño europeo y dando sus primeros pasos en otro país.
Radicada en Cataluña, Ianina, demostró en el parquet de lo que era capaz. Los directivos de Vila-Seca lo sabían y no dudaron en contactar a sus padres. «Al final de temporada, después del confinamiento, me envía un mensaje el entrenador del ‘Vila’. Junto a los dirigentes, querían hablar conmigo y mis padres para comentarme la idea de jugar para ellos», explicó.
«Me siguieron durante toda la temporada, buscando una base que guie al equipo y sea la capitana. Como primera opción me tenían a mí», reveló Martinelli.
Adaptarse a una nueva cultura, a sus 15 años, es todo un reto. De igual forma, supo sobrellevarlo y así lo remarcó: «La mayoría de mis compañeras de equipo iban a cursar conmigo en la misma escuela, por lo que la adaptación se me dio bastante bien. Aun así, aprender catalán me generó problemas al principio. Sigue siendo algo que tengo que mejorar mucho».
«De Rosario extraño mi familia y jugar en Atalaya con mis amigas», confesó.
«El nivel de competencia de Atalaya a diferencia del actual, era mucho menos competitivo. El club no exigía tanto, en comparación ahora con Vila-Seca que son mucho más exigentes tanto en prácticas como en la Liga», destacó la nueva capitana de su equipo.
Y finalizó: «Jugar en otro país, sin importar que me haya ido por motivos personales, es una meta cumplida. Antes de plantearme objetivos, primero espero poder empezar el torneo de una vez por todas y entonces hacer una buena campaña con mi equipo. Quiero tener el título de secundaria y más adelante jugar profesionalmente para así, algún día, poder representar a la Selección».