Facundo Sibulovsky, oriundo de Villaguay, es profesor de Educación Física y arribó a Unión de Arroyo Seco en el 2000 y allí estuvo hasta 2005. Finalizó su carrera y posteriormente, volvió a su ciudad natal. No obstante, en 2012, retornó a la ciudad por razones personales; jugó y fue PF a la vez del primer equipo.
En 2013 se retiró y posteriormente dedicó la preparación física de las formativas y primera división. A su vez, es encargado del mini básquet del ‘Panza’ hasta la actualidad. En su currículum dentro de la Asociación Rosarina, se remarca el ascenso de la C a la B en el 2015 y también el de la B a la A2 en el 2018.
«El freno del año pasado nos sorprendió a todos. Estábamos a punto desde lo basquetbolístico y físico», comenzó relatando sobre la primera experiencia pandémica. Asimismo, conforme pasó el tiempo, aprendió y se acostumbró, como sus demás colegas.
Sobre esto, Facundo, explicó: «Arrancamos mandando trabajos a todos los jugadores. Estuvimos en constante comunicación para guiarlos en el proceso del entrenamiento a distancia. Pero todo se fue dilatando y no hubo básquet en 2020».
Respecto a dicha experiencia digital, remarcó: «El trabajo de mantención de la condición física es muy importante, pero al igual que el año pasado no hay fecha de regreso a la competencia. Esa incertidumbre es difícil tanto para jugadores como cuerpo técnico. Por eso pasado un tiempo los trabajos fueron optativos y autónomos, tratando siempre de priorizar el bienestar físico y psicológico de los jugadores».
Tras la vuelta a las actividades, Sibulovsky contó cuál fue el panorama con el que se encontró: «Hubo que ir manejando y dosificando las cargas de cada jugador, para luego ir equiparando la condición física de ellos».
Por otro lado, el certamen doméstico 2021 fue efímero. «Arrancamos muy bien el torneo, desde el juego y sobre todo muy intensos desde lo físico. Es a lo que apuntamos. Luego tuvimos un par de jugadores lesionados que nos complicó un poco», sostuvo sobre el arranque de la Primera A.

«Nos conocemos muchos con Luciano Martín y sé muy bien cuál es su idea de juego. La mayoría de los trabajos están planificados con base en situaciones y ritmo de juego». Si bien Facundo prefiere el trabajo con balón, aclaró: «A veces para algunas cosas hay que dejarla. Trato que los jugadores la pasen bien y se diviertan, generar un buen clima de trabajo es fundamental para luego desarrollar los entrenamientos al máximo».
«La unión y química del grupo es algo fundamental».
Finalmente, consultado por sus objetivos pasados, Sibulovsky dijo: «Priorizamos el bienestar de los jugadores a través de la actividad física y la comunicación. Para tratar de pasar este momento tan difícil. De todas formas, estamos con mucha esperanza que en esta segunda parte del año volvamos a la competencia».