Diego Portillo, preparador físico del plantel femenino de Talleres RPB, dialogó con Línea de Tres sobre cómo fue trabajar durante la pandemia y cómo afrontan la vuelta. El conjunto ‘Auriazul’, comandado por Néstor Gnass disputará el retorno del Torneo Federal Femenino. En dos encuentros acumulan una victoria y una caída.
Diego trabaja en forma conjunta con su colega, Fernando Hernández. Primeramente, Portillo, comentó como fue trabajar durante la pandemia: «Nosotros comenzamos a trabajar con el equipo en marzo. No fue mucho el tiempo de confinamiento que vivimos. Pero unas semanas antes del Federal, tuvimos que realizar un aislamiento completo del equipo por prevención. Ya que varias chicas dieron positivas de COVID-19″.
«Finalizada esa etapa, volvimos a los entrenamientos normales. Hasta que se volvió a cortar todo. Por cuestiones de infraestructura donde hay básquet masculino, generalmente el femenino entrena dos veces por semana. A eso le podemos agregar el día sábado, si es que no hay partido. Tenemos muy pocos estímulos, así que priorizamos los trabajos intermitentes», agregó.
También, subrayó: «Una vez en competencia, buscábamos el mantenimiento físico y técnico. Abocándonos más a los trabajos de velocidad, técnica de carrera, pliometria, coordinación y un poco de fuerza. Obviamente que siempre buscamos que los ejercicios estén integrados al deporte de manera específica».
Y continuó: «Ahora, durante la semana que no pudimos concurrir al club les entregamos algunos planes para realizar en la casa o en la zona. Un plan de fuerza, uno de pliometría (saltos) y uno de intervalados (tiradas)».
Sobre el balance de esa primera parte, comentó: «Es difícil evaluar. Trabajamos como pudimos. No son las cantidades de estímulos que quisiéramos tener en la semana. Otro punto en contra es la interrupción de la competencia. Buscamos adaptarnos y dar lo mejor que tenemos».
Diego habló de como fue la puesta a punto para el debut: «Prácticamente no tuviéramos pretemporada. A la semana de comenzar ya estábamos compitiendo por la Rosarina. A veces interfería directamente en los entrenamientos. Dependiendo el rival, ajustábamos las intensidades o descargábamos. Siempre optimizar las cargas en el tiempo que nos toca interferir. Teniendo en cuenta que no le podemos sacar mucho tiempo al entrenador».
Respecto al trabajar en forma conjunta con el DT, declaró: «Estamos en permanente contacto. Néstor nos consulta mucho sobre las cargas y nos cede tiempo cuando es necesario. Igualmente nosotros somos consientes de las prioridades en determinados momentos. Néstor es un entrenador con quien me resulta cómodo trabajar. Compartimos CT en la Selección Rosarina mayor en 2016″.
Por otra parte, hizo mención a la importancia de tener al Torneo Federal como motivación: «Las jugadoras estaban con muchas ganas de disputarlo. Es muy grande el esfuerzo físico, mental y económico que realizan. Competir con toda esta incertidumbre lleva a un gran desgaste mental. Tienen un ánimo que contagian entrenamiento a entrenamiento».
Con la vuelta a la competencia, declaró: «Haciendo un análisis más subjetivo, creo que están mejor. Hoy veo que terminan muy bien sus ejercicios. Además, en las evaluaciones, la mayoría realizaron mejores test».
Asimismo, agregó: «Creo que si bien tenemos algunas bajas por cuestiones laborales o personales, que esperamos recuperar lo más pronto posible, el ingreso al equipo de Foresto y Centurión se va a ver reflejado en el juego de manera positiva».
Finalizó la charla remarcando el objetivo que se planteó como preparador físico: «Busco colaborar positivamente en el desarrollo deportivo de las más chicas. Mejorar el rendimiento físico, pero sobre todo hacer lo que está a nuestro alcance para evitar lesiones».