En la LEB Plata de España, algunos rosarinos dijeron presente representando a sus equipos. Tras una dura lesión en la rodilla y como búsqueda para recuperar su nivel, Bautista Lugarini llegó a Valencia a demostrar su calidad luego de su paso por la LEB Oro.
El alero tomó la decisión de bajar una categoría para sumarse al conjunto ‘Che’ posterior a no poder debutar con el club balear. De esta manera se ensambló a los argentinos Gonzalo Bressan y Juan Hierrezuelo en la institución. El joven jugador que hace sus primeras armas en Europa charló con Línea de Tres.
«Mi primera temporada en Europa fue un tanto atípica. Ya que mis primeros cinco meses en el Palmer Alma Mediterránea no pude jugar ningún partido porque estuve lesionado de la rodilla. Así que de básquet puedo hablar desde que estoy en Valencia. Fue una temporada rara que terminó dentro de todo bien», explicó sobre la llegada a su nuevo equipo.
Y agregó: «Costó adaptarse más que nada al entorno. Estar lejos en mi primera temporada afuera, yo creí que iba a ser más fácil. Pero es la adaptación que tiene que hacer todo jugador y que lo vas haciendo solo con el tiempo y como se van dando las cosas».

Ya con la mente en su segundo equipo, dijo: «En Valencia el balance es muy positivo. Cuando llegué, estábamos en los últimos lugares con sólo dos partidos ganados y terminamos clasificando a playoffs en la última fecha. Llegamos como octavos y sacamos a dos candidatos. Posteriormente, caímos en la final por el ascenso en tiempo suplementario».
«Así que el balance es mucho más que positivo. Además, terminamos jugando un básquet de altísimo nivel. E individualmente, fue todo adaptación. Desde irme, hasta la lesión y el cambio de equipo. Ya vendrán temporadas de mayor rodaje», auguró.
Además, habló de la ayuda de los argentinos en el equipo: «Fueron parte fundamental en el equipo. Además de todo lo que aportaron dentro de la cancha, a mí me ayudaron mucho con la adaptación. La verdad que estar con ellos era estar un poquito más cerca de Argentina. Nos ayudamos el uno al otro y eso sirve muchísimo».

En el plano deportivo, remarcó: «Contra Albacete fue una serie muy dura. Nosotros éramos un equipo más joven y con proyección y ellos estaban preparados para ascender. Igual obviamente queríamos ganar y salimos a eso. Fue muy dura y perdimos por la diferencia».
Y continuó: «Con el correr de los playoffs nos fuimos acostumbrando al sistema de diferencia de puntos. Así que perder de visitante contra el candidato y en suplementario, creo que fue una buena tarea. Pero nos fuimos triste porque podríamos haber ganado».
«La palabra que define a esta temporada es adaptación»

Sobre su tiempo en el país ibérico, comentó: «El básquet de España me sorprendió mucho, yo pensé que reinaba el fútbol, pero fue increíble. Las canchas llenas en playoffs y muchísimo apoyo de la gente. Había mucha admiración por el básquet. Me sorprendió para bien, porque al jugador es lo mejor que le puede pasar».
En cuánto al nivel, confesó: «La LEB Plata es durísima. Me sorprendió lo física y el ritmo de juego que hay. Es muy elevado y además, hay que estar muy concentrado para jugar. Hay 1000 tácticas y hay que estar con la cabeza al 100% metido. La verdad hay muy buenos equipos y jugadores».
Para cerrar dio un pantallazo de su actualidad: «Mi futuro no lo conozco todavía. Por ahora, estoy en Rosario recargando pilas y sigo entrenando. Esperando el llamado para volver a Europa, aunque por el momento no hay nada concreto y sigo con la puesta a punto».